En mi perspectiva, el uso de manuales en intervenciones es fundamental, siempre y cuando se mantengan actualizados y sean adaptables. Los trastornos por uso de sustancias son experiencias que varían entre individuos, lo que implica que un enfoque único no satisfará las necesidades de todos. Al contar con un manual base, este puede enriquecerse con las múltiples experiencias de profesionales de la salud, lo que a su vez aumenta su validez al adaptarse a las realidades regionales diversas. Además, conforme a las conclusiones del artículo, es esencial realizar más investigaciones para fomentar el...